Adoro estas noches lluviosas, donde las gotas de agua golpean ferozmente contra las ventanas. Me gusta hacer garabatos sobre los vidrios empañados, envolverme en gruesas y abrigadas mantas, pegarme a mi vieja estufa eléctrica y soplar el vapor que desprende una taza de té sobre mis rodillas. Son noches melancólicas, algo aburridas, interminables. En mi cabeza revolotean vagos recuerdos y pensamientos distraídos.
3 comentarios:
es divino tu blogg;
es cierto,io tmb disfruto la lluvia,me gusta recordar el ayer,me gusta imaginar,me encantaa...besos!
Nada mejor que ver la lluvia caer y dormir con ella!
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